El exceso de publicidad en la televisión

Por: Redacción vemosTV - 29/11/2013

La publicidad en la televisión es uno de los temas más polémicos que rodean el mundo de la pequeña pantalla. Pero, ¿es excesiva la publicidad en televisión?

Televisión - Gtres

La publicidad es uno de nuestros mayores quebraderos de cabeza cuando nos situamos frente a la pantalla de un televisor y es que aunque todos somos conscientes de la necesidad de los anuncios en televisión, la interrupción de nuestro programa o serie favorito para ver una marca de detergente es algo que, sin poder evitarlo, nos saca de nuestras casillas. Sin embargo, como todo tema polémico de actualidad, el supuesto exceso de publicidad en la televisión española puede verse desde dos puntos de vista.

Los estudiosos del mercado y publicistas están convencidos de que la publicidad es el medio de supervivencia de las televisiones. Y así es. Sin anunciantes que quisieran que su producto se anunciara en determinados espacios televisivos, estos no podrían mantenerse en antena, pues la cadena en sí no podría asumir el coste de producir tal o cual programa ni de pagar a sus protagonistas. Hasta aquí,todos tenemos claro que la publicidad es fundamental y más aún si nos paramos a pensar la ingente cantidad de dinero que paga un anunciante para que su anuncio sea el último del año, por ejemplo.

Pero aún así, ¿hay excesiva publicidad en la televisión? Según Europa la hay. Y es que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha condenado a España por su exceso de publicidad en la televisión. La normativa europea establece doce minutos de publicidad por cada hora de programación emitida, algo que al parecer no cumplen las televisiones españolas, en las que siempre se escapa algún anuncio más de la cuenta.

Dejar series o programas a medias es lo más común en nuestras noches y sobremesas y es que el sueño acaba venciéndote cuando la parte más interesante se corta por los anuncios. Parece que las televisiones se dieron cuenta de ello y han apostado por introducir dos minutos de publicidad cada diez de emisión, algo que se hace todavía más pesado si cabe. ¿La solución? Muchos parecen haberla encontrado en Internet, en el que los anuncios, aunque cada vez más frecuentes, son menos que en televisión. Tendremos que dejar pasar el tiempo para ver si la red se hace con el poder de los contenidos y la televisión tiene que modificar su táctica o, si por el contrario, la televisión seguirá siendo nuestra mejor compañera, haya la publicidad que haya.