Tecnologia / se agranda el ancho de banda

Telefonía móvil: el país ya se prepara para las redes de 4G

Las principales operadoras locales hacen pruebas de cara a 2012. El objetivo es mejorar la experiencia con los dispositivos inteligentes.

Por Martina Rua

Se estima que más del 15% de los teléfonos celulares utilizados en la Argentina ya corresponden a smartphones (teléfonos inteligentes), que son usados cada vez menos para hacer llamadas de voz y más como computadoras de bolsillo para navegar en Internet, jugar on line, bajar y ver videos e interactuar en las redes sociales. Estos nuevos usos, tendencias que se acentúa mes a mes en todo el mundo, requieren un mayor ancho de banda que permita una experiencia fluida, más rápida y de calidad. De eso se trata el concepto de 4G, la cuarta generación de telefonía móvil que ya desembarcó en 14 países y aquí está comenzando a asomar.

Generaciones. ¿Cómo mejora el concepto 4G al de 3G? “Se trata de una tecnología móvil que permite aplicaciones que requieren altas velocidades de datos para su procesamiento, como transmisión de videos de alta definición, archivos de gran capacidad como imágenes de medicina, juegos interactivos, descarga de videos. Es unas diez veces más rápido que la 3G con una menor demora en la respuesta al usuario, y hace un uso más eficiente del recurso de las redes móviles que es el espectro radioeléctrico”, explicó Erasmo Rojas, presidente de 4G Américas, organismo que impulsa la adopción de esta tecnología en todo el continente. “Con 4G, y con la relevancia que tiene el cloud computing, si no tenés acceso a banda ancha fija y querés acceder a tus datos desde dispositivos más pequeños lo podés hacer con un razonable costo y velocidad de red”, completó Gabriela Gallardo, directora de Negocios, Educación y Gobierno de Intel Cono Sur, que integra el Wimax Forum, otro de los impulsores de la adopción de 4G.
Más allá de que existen múltiples pruebas a nivel regional, todavía ningún país de Latinoamérica brinda el servicio. “Chile realizó pruebas de 4G a fines de 2009 y el gobierno planea adjudicar espectro en la banda de 2.6 GHz este año; en Brasil, los operadores ya anuncian pruebas de 4G para el segundo semestre de 2011 y el ente regulador anuncia la subasta de la banda de 2.6 GHz en 2012, entre otros”, ejemplificó Rojas.

Por casa. En la Argentina, las operadoras Movistar y Personal, que juntas tienen 33 millones de clientes, comenzaron a realizar pruebas de 4G el año pasado en distintas provincias del país con resultados satisfactorios que incluyeron videoconferencias de alta definición entre dispositivos. Por su parte, las fabricantes de teléfonos como Samsung con su modelo Infuse o Motorola con el Atrix ya promocionan sus terminales que soportan esta tecnología. Si todos están preparados, ¿qué falta? Disponibilidad de espectro radioeléctrico. Para que esta tecnología sea posible es necesario que el Gobierno adjudique espectro radioeléctrico para implementar redes de tipo LTE (Long Term Evolution), como las veinte que funcionan en países como Estados Unidos, Japón o Suecia. “El espectro es un bien administrado por el gobierno (en la Argentina, por la Comisión Nacional de Comunicaciones) y que normalmente se subasta a través de ofertas licitatorias. La no disponibilidad de espectro significa que no forma parte de la agenda regulatoria que prioriza el gobierno en ese momento”, explicó Rojas.
Por eso, los distintos jugadores del mercado le reclaman al Gobierno una agenda activa que abra el espectro. Al hablar de fechas todos son muy cautos. Desde las operadoras, esperan que 2012 sea el año de los primeros servicios, pero esto también dependerá de la Secretaría de Comunicaciones. Es posible que los usuarios argentinos, grandes consumidores de tecnología en la región, presionen desde el consumo y logren llamar la atención de quienes pueden decidir sobre la implementación de esta tecnología que se consolida como el próximo estándar tecnológico mundial.

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¿Estará hasta en la sopa?

La tecnología 4G está lejos de reservarse exclusivamente para los teléfonos inteligentes. El usuario de Internet actual exige cada vez mayor potencia y calidad en su experiencia de navegación virtual, ya sea para ver un video en su e-book mientras viaja en colectivo, para mantener una videoconferencia con otra persona a través de sus tabletas en dos puntos distintos del planeta o para disputar un partido de fútbol on line a través de la TV.
En este sentido, la llegada de la tecnología de cuarta generación no sólo promete mejorar las posibilidades de navegación, sino que además busca cambiar la vida de los individuos ya que, aseguran sus impulsores, modificará gradualmente la manera en que uno manipulará o se relacionará con los aparatos domésticos, como por ejemplo heladeras, automóviles, computadoras (siempre que tengan conexión a la Web) y con la casa en general. De hecho ya se están pensando enchufes de pared y enchufes múltiples con la capacidad de monitorear la temperatura del hogar y administrar su energía. ¿Futurología? El año que viene lo comprobaremos.