Messi, Palermo y el fútbol-terraza
Es que ni bien vi el spot que Adidas lanzó con motivo de la Copa del Rey que disputarán el Barcelona y el Real Madrid este miércoles 20 de abril, recordé la “hazaña” que Martín Palermo logró concretar en la previa de Sudáfrica 2010, de la mano de Procter & Gamble y sus marcas Gillette y Head & Shoulders. Veamos la primera pieza:
Adidas apela, una vez más, a un abultado elenco de celebridades futboleras que visten sus ropas y los reúne en una sola pieza, como para que el efecto sea abrumador y, aunque se trate de un torneo deportivo local, derive, como casi cualquier cosa que sucede actualmente en el fútbol profesional y globalizado, en una situación de alcance mundial, con las redes sociales como plataformas perfectas para el despegue.
El enfoque de la idea no arriesga demasiado. Si apenas una celebridad suele devorarse cualquier búsqueda de originalidad, imaginen lo que sucede si medio equipo del Barcelona y otro tanto del Madrid se juntan en un mismo comercial. Con Lionel Messi como protagonista, desfilan Xabi Alonso, Esteban Granero, el argentino Ángel Di María, Álvaro Arbeloa y Sergio Canales, todos merengues, y Dani Alves, David Villa y Xavi Hernández, en representación de los catalanes.
La realización estuvo a cargo de Domingueros Producciones, una compañía aragonesa que viene trabajando para Adidas en España. Filmado en Madrid y Barcelona durante marzo y abril, el comercial ubica a los futbolistas en terrazas de ambas ciudades, cruzando pelotazos con mensajes escritos de tono desafiante, como para calentar la previa del superclásico español en su versión final de Copa del Rey.
Bien lejos de esas terrazas, pero también en la altura, casi un año antes Martín Palermo ya había experimentado esto de impactar una pelota cerca del cielo, aunque el destinatario, en este caso, no eran otros jugadores sino la red de un arco, ubicada en una terraza cercana.
Pensada por CraveroLanis BTL y con dirección general creativa de Peta Rivero y Hornos, aquella campaña giraba alrededor del concepto “Viví sin límites”, palabras que formaban un hotsite y que se plasmaban de manera concreta en la destreza casi imposible del 9 de Boca.
Fútbol-terraza de acá y de allá, generado por billeteras muy distintas pero dedicado a públicos muy parecidos.
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