Son Alejandra Cucién, Alba Sáenz y Lucila de la Serna, mamás de Nicolás, Federico y Benjamín, fallecidos en el choque ocurrido en 2006
Las piernas de Benjamín Bravo, con sus jeans gastados y zapatillas roqueras, están en primer plano. De fondo, una ruta de La Pampa. La foto es en blanco y negro, y fue tomada por su padre, profesional del retrato, meses antes de que el protagonista, de 16 años, se convirtiera en uno de los nueve alumnos fallecidos en el choque que se conoció como La tragedia de Santa Fe.
Tres madres de la tragedia de Santa Fe crearon un manual de conciencia vial
Es un libro pensado para estudiantes secundarios que están cerca de sacar el registro de conducir. Ya lo distribuyeron entre 2500 chicos de 19 escuelas de la provincia de La Pampa, y quieren llegar a adolescentes de toda la Argentina.
Las piernas de Benjamín Bravo, con sus jeans gastados y zapatillas roqueras, están en primer plano. De fondo, una ruta de La Pampa. La foto es en blanco y negro, y fue tomada por su padre, profesional del retrato, meses antes de que el protagonista, de 16 años, se convirtiera en uno de los nueve alumnos fallecidos en el choque que se conoció como La tragedia de Santa Fe.
Esa foto de Benjamín es ahora la tapa de “Despertar conciencia vial”, un libro sobre la importancia de la seguridad en el tránsito vehicular. Está dirigido a alumnos de 2º y 3º año del Polimodal, porque están cerca de sacar la licencia de conducir, y fue escrito por las mamás de tres de esos chicos que murieron el 8 de octubre de 2006, cuando volvían a Buenos Aires tras llevar donaciones a una escuela rural de la localidad chaqueña de El Paraisal. Los siniestros viales son la principal causa de muerte en los jóvenes de entre 15 y 25 años, según indica el libro, y en la mayoría de los casos, esos jóvenes no son los causantes de las tragedias, sino las víctimas.
Con el apoyo de la asociación Conduciendo a Conciencia –que los familiares de las víctimas crearon a partir de la tragedia–, Alejandra Cucién (mamá de Nicolás Kohen), Alba Sáenz (mamá de Federico Ecker) y Lucila de la Serna (mamá de Benjamín) encontraron en este libro la forma de llegar a los adolescentes en las aulas porque creyeron, y siguen creyendo, que eso puede contribuir a cambiar los hábitos viales no sólo de las nuevas generaciones, sino también de toda la sociedad, a partir de lo que esos chicos les transmitan luego a los adultos.
Alejandra explica a Tiempo Argentino: “Hasta ese 8 de octubre, nosotras éramos parte de una sociedad que suponía que si los chicos viajaban en un micro, había una escuela y una empresa de turismo que se hacían responsables. Pero la vida nos dio una cachetada. Por eso entendemos que hay un montón de cosas para reflexionar y es importante que los chicos sepan que pueden cuidarse, ir a un lugar, y volver.” Alba amplía: “En estos años adquirimos experiencia en cómo trabajar para despertar la conciencia vial. Hicimos campañas con jóvenes, desde la solidaridad, siempre con mensajes positivos. Buscamos lograr el compromiso de los jóvenes.”
Las tres consideran que no existe suficiente material didáctico sobre asuntos viales que trascienda la explicación sobre qué significa cada señal de tránsito. Notan que entre los adolescentes todavía hay un vacío en ese aspecto, y por ello pensaron en un libro que a los estudiantes les resultara atractivo, desde el diseño y el lenguaje (ver aparte).
Lucila, mamá de Benjamín, detalla: “La idea surgió cuando nos acercábamos al 8 de octubre de 2010, que en la gestión de Daniel Filmus como ministro de Educación fue instaurado como el Día del Estudiante Solidario. Teníamos ganas de preparar actividades para las escuelas y la Agencia Nacional de Seguridad Vial informó que iba a entregar subsidios habilitados por el Banco Mundial, con la idea de solventar proyectos que tuvieran que ver con el tema.”
Fue entonces cuando presentaron un proyecto que tenía como destino algunas aulas de aquel escenario donde Benjamín había sido fotografiado.
Así consiguieron el subsidio, de 184 mil pesos, y comenzaron a trabajar con 2500 alumnos de 19 escuelas de la provincia de La Pampa.
“Fue interesante porque a las capacitaciones asistían docentes y también bomberos, médicos, periodistas”, celebra De la Serna.
Ahora buscan conectarse con los ministerios de Educación de otras provincias del país, para poder editar el libro en toda la Argentina, y también recibieron consultas desde Uruguay y Colombia.
Mientras tanto, difunden el material a través de la Web o .
Los ojos claros de estas tres mujeres se humedecen al describir a sus hijos, pero se iluminan ante la idea de que esas muertes puedan impulsar un cambio.
Alba subraya que “es importante difundir el respeto a las normas, pero sobre todo es fundamental que los chicos conozcan sus derechos a exigir que las normas se cumplan”.
Alejandra refuerza la idea: “El Estado tiene su responsabilidad, pero si no nos ponemos cinturón cuando vamos manejando, no podemos decir que es responsabilidad del Estado.”
Y Lucila concluye: “Cada actividad del libro genera un intercambio con algún sector de la comunidad. Buscamos que los jóvenes participen dentro de la vida social.” «
entrevistas y debates
"El libro Despertar conciencia vial está destinado a los jóvenes, ya que ellos son quienes más padecen la problemática", dice la introducción del manual para alumnos de 2º y 3º año de nivel polimodal, creado por tres madres de víctimas fatales de la tragedia de Santa Fe. En los siete capítulos hay entrevistas a artistas como Ricardo Mollo, León Gieco y el fallecido Luis Alberto Spinetta –que acompañó la lucha desde el primer día–, en uno de sus últimos registros públicos. El libro va acompañado de un DVD con las entrevistas y también propone, por ejemplo, discusiones sobre el uso de la palabra "accidente", y el rol del Estado en los siniestros viales.
la causa, seis años después
Nueve alumnos y una maestra murieron el 8 de octubre de 2006, cuando volvían de llevar donaciones a una escuela rural de la localidad chaqueña de El Paraisal.
En el kilómetro 650 de la ruta 11 santafesina, llamada la "ruta del Mercosur", el micro que los trasladaba junto a otros estudiantes fue embestido de frente por un camión conducido por un hombre alcoholizado, que también murió tras el impacto, al igual que su acompañante.
Los padres del colegio Ecos siguen reclamando que se le quite la licencia al conductor del ómnibus, Oscar Atamañuk, por la maniobra que realizó en el siniestro, al cruzarse de carril. El chofer quedó absuelto en primera instancia, pero se declaró su responsabilidad en la segunda instancia, aunque ahora la causa está detenida.
Atamañuk continúa manejando vehículos, y los familiares de las víctimas han denunciado que instaló una remisería y que realiza viajes interprovinciales.
"que se expanda a todo el país"
"Fue muy rica la experiencia. Es un proyecto que avalamos totalmente y que sería importante que se expandiera a todo el país", dijo a Tiempo Argentino Griselda Conde, directora de Educación General Secundaria de La Pampa y era responsable del área de Educación Vial cuando comenzó a estudiarse esta propuesta en ese territorio.
La Pampa es, por ahora, la única provincia que implementó el libro Despertar conciencia vial, creado por tres madres de la Tragedia de Santa Fe. Lo recibieron cerca de 2500 chicos en 19 escuelas secundarias. Además, desde 2011, esa provincia incorporó a su calendario escolar el 10 de junio como Día de la Educación Vial y distribuyó 7000 ejemplares de una bibliografía que incluye secuencias didácticas para alumnos de nivel inicial y primario.
Las autoras del libro eligieron La Pampa porque conocían gente allí, pero buscan ampliarse a todo el país.
"Las tragedias viales son una epidemia silenciosa, donde la franja etaria más vulnerable es la de los jóvenes. Es importante prevenir y que se impliquen las instituciones. Es valioso el aporte de estas madres y las miradas con la que hicieron el trabajo", celebró la funcionaria.
Un homenaje
al flaco Spinetta
El miércoles 8 de agosto, desde las 19, la ONG Conduciendo a Conciencia presentará a más de cien artistas en nueve escenarios de la Ciudad de Buenos Aires, para homenajear a Luis Alberto Spinetta, el músico fallecido en febrero, quien acompañó a esos padres en la lucha tras la muerte de sus hijos en la “tragedia de Santa Fe”. El evento se titula “Mañana es mejor” y forma parte de la campaña de conciencia vial que realizan padres y chicos desde la muerte de los nueve alumnos y su profesora. Para participar, la entrada será una donación de útiles escolares. La programación se irá actualizando en .
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