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lunes, 15 de diciembre de 2008

DEBATE
Internet será el nuevo y cruento campo de batalla
El primer ataque cibernético ocurrió en agosto, cuando tropas rusas invadieron Georgia. Son impredecibles los perjuicios de estas armas.
Por: Joseph Nye
POLITOLOGO, UNIVERSIDAD DE HARVARDEn agosto de 2008, tropas rusas invadieron Georgia. Los observadores debaten sobre quién disparó primero, pero hubo una dimensión poco advertida del conflicto que tendrá repercusiones importantes en el futuro.Piratas informáticos atacaron sitios web del gobierno de Georgia en las semanas inmediatamente anteriores al estallido del conflicto armado. El conflicto ruso-georgiano ha encarnado los primeros ataques cibernéticos que han acompañado un conflicto armado. ¡Bienvenidos al siglo XXI!Los ataques cibernéticos y la posible guerra cibernética ilustran las vulnerabilidades y la pérdida de control, cada vez mayores, en las sociedades modernas. Los gobiernos se han preocupado principalmente por los ataques de piratas informáticos a la infraestructuras de tecnologías de la información de su burocracia, pero hay muchas otras vulnerabilidades sociales, además de las de las computadoras gubernamentales.En una carta abierta al Presidente de los Estados Unidos de septiembre de 2007, profesionales norteamericanos de la defensa cibernética avisaron que "las infraestructuras fundamentales de los Estados Unidos, incluidas las de la energía eléctrica, las finanzas, las telecomunicaciones, la asistencia sanitaria, el transporte, el agua, la defensa y la red Internet, eran sumamente vulnerables a ataques cibernéticos. Se necesitan rápidas y resueltas medidas mitigadoras para evitar un desastre nacional". En el turbio mundo de Internet, los atacantes resultan difíciles de identificar. En el actual mundo interconectado, un ataque cibernético no identificado a las infraestructuras no gubernamentales podría resultar gravemente perjudicial. Por ejemplo, algunos expertos creen que la red eléctrica de una nación puede ser particularmente susceptible. Los sistemas de control que las compañías eléctricas utilizan están consideradas vulnerables a ataques que podrían dejar apagadas ciudades y regiones durante días o semanas.Además, los ataques cibernéticos pueden afectar al funcionamiento de los mercados financieros y causar una pérdida económica inmensa al cerrar los sitios web comerciales. Algunas hipótesis, incluido un "Pearl Harbour electrónico", parecen alarmistas, pero ilustran la difusión del poder desde los gobiernos centrales hasta los individuos. En 1941, la potente armada japonesa utilizó muchos recursos para causar daños a una distancia de miles de kilómetros. En la actualidad, un pirata informático, mediante programas cibernéticos maliciosos, puede causar un caos en lugares remotos con poco costo para él. Además, la revolución de la información permite a las personas perpetrar sabotajes con una velocidad y un alcance sin precedentes. Se calcula que el virus llamado love bug, lanzado en las Filipinas en 2000, ha costado miles de millones de dólares en daños. También los terroristas pueden aprovechar las nuevas vulnerabilidades en el ciberespacio para lanzarse a una guerra asimétrica.

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