EL DEBATE DEL MES: ¿CUÁLES SON LAS CLAVES PARA CONJUGAR INNOVACIÓN Y ÉXITO?
En una nueva entrega del debate del mes organizado por adlatina.com, las fundadoras y directoras de Trnd Argentina señalan que hoy las personas están deseosas de compartir y defender sus experiencias. Entonces, proponen tomar esa información y utilizar las ideas de los consumidores para que contribuyan en los procesos de marketing.
“Entre innovación y éxito, necesariamente tenemos que ubicar al consumidor”, sostienen Fonticiella y Amat.
Empezamos buscando 'innovación' en Wikipedia y así, dimos con la primera pista: la inteligencia colectiva. ¡Fantástico invento! Y probablemente, una de las mayores innovaciones de los últimos tiempos.
Porque pensándolo bien, entre innovación y éxito, necesariamente tenemos que ubicar al consumidor. Y darle el poder que merece. Y el crédito (en términos de reconocimiento), claro.
Si dos de cada tres productos lanzados al mercado fracasan, tal vez sea hora de innovar a través de la inteligencia colectiva y así, tener un “plan B”. Y que ese plan consista en conectar, en formar parte de la conversación, no sólo para emitir mensajes ¡sino también para escuchar y aprender! Algo así como hacer “crowdsourcing” que, según Wikipedia, proviene del inglés crowd (multitud) y outsourcing (externalización) y se podría traducir al español como “colaboración abierta distribuida”, que consiste en externalizar tareas a un grupo numeroso de personas o una comunidad, a través de una convocatoria abierta.
Hoy tenemos la suerte de contar con los mejores elementos para el crowdsourcing: la conectividad social, el interés del consumidor por las marcas, la credibilidad y el creciente poder del boca a boca, entre otros.
La conectividad social, porque el consumidor está permanentemente conectado, valora la inmediatez y toma la mayoría de sus decisiones basándose en las experiencias y opiniones de su círculo social (on y offline). Esto, lo hace cada vez más inteligente, deseoso de participar y de contribuir en los procesos de marketing.
El interés del consumidor por las marcas, hace que, por ejemplo, el 17 por ciento de las conversaciones gire en torno a empresas, marcas, productos o servicios.
La credibilidad, porque la gente busca relaciones humanas. Interacciones reales, transparentes, divertidas, coloquiales… ¡Creíbles! Las 'historias reales de gente real', a la cual le gusta (o no) un producto, una marca, un lugar, una actitud.
El creciente poder del boca a boca, porque a través de sus conversaciones, los consumidores pueden construir o destruir una marca. Motivados solo por su entusiasmo, los consumidores difunden sus experiencias a través de todos los canales. Recomiendan productos y servicios porque quieren ayudar a los demás, no para recibir un pago o recompensa a cambio. Comparten información porque les encanta sentirse bien informados y, a través de las recomendaciones, pueden demostrar sus conocimientos a los demás.
Los consumidores sienten verdadera pasión por 'sus' marcas. En el marketing, así como también en muchos otros aspectos, el diálogo 1 a 1, hoy volvió a ser fundamental.
En conclusión: en toda cultura en la cual se quiera evolucionar, es básico aceptar el error o el fracaso como una experiencia de mejora y aprendizaje. ¿Y si probamos con la inteligencia colectiva y hacemos “crowdbrands”?
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