GLOBAL | FÓRMULAS SEGURAS PARA EL FRACASO

Cinco caminos que tienen los marketers para arruinar campañas sociales

(Advertising Age) - Los ejecutivos de agencia dicen que los clientes a menudo se interponen en el camino para impedir su propio éxito en medios sociales.

• El autor, Seth Simonds, es director de innovación social de Mullen.

Usted puede no ser capaz de predecir el éxito viral de una campaña social, pero seguramente puede hacerlas fracasar. Desde mi lugar en el mundo de agencias, he observado que los clientes tienen la tendencia de cometer los mismos errores. Aquí hay cinco formas ferozmente populares para asegurar que su próxima campaña social nunca logre despegar.

Ponga todo su presupuesto social detrás de una simple plataforma. Si usted quiere derribar a su próxima campaña social, asegúrese de tomar sólo una plataforma y trate al resto como huérfanos desfigurados. ¿Vio esas marcas que ponen todo en Facebook e introducen links hacia sus contenidos en otras plataformas? Allí mueren campañas excelentes. Todos para una y una para nada.

Ignore cualquier estrategia que no se alinee con sus instintos profundos. Dado que la mayoría de los marketers senior a ambos lados de la mesa tienen muy poco tiempo para estar al día con las mejores prácticas -y ni hablar de descubrir las prácticas que vendrán-, descansar en lo que sienten sus tripas es una gran manera de sumergir a una campaña bajo el agua hasta que deje de luchar. Así que enfóquese en lo que siente e ignore la data. Si usted no hace tuits, ¿por qué deberían hacerlos los demás?

Deje al management de legales y derechos hasta minutos antes del lanzamiento. Las negociaciones por talentos pueden tomar meses, así que asegúrese de esperar hasta que todo esté armado y los spots de TV vuelvan de la compañía de producción antes de empezar a preguntarse por qué su campaña no es como la de Old Spice. De esa forma usted se habrá encerrado en una simple pieza de contenido de limitada vida útil, de modo que si ella no consigue diez mil espectadores en YouTube, usted probablemente tendrá que bajarla después de doce meses porque su contrato de talento ha finalizado.

Sólo utilice la tecnología que haya visto usar a sus competidores. Este es uno de los mejores caminos que tiene cualquier marketer para arrojar a la basura al menos 100.000 dólares en algo inútil. Esa tab de Facebook que su competidor construyó doce meses atrás es una reliquia del tiempo en que la gente realmente buscaba tabs. Si la falta de percepción es un resultado, entonces obtendrá tremendos resultados.

Jamás escuche a cualquier feedback que provenga de cualquier lugar. De todas las formas de arruinar una campaña social, esta es la más efectiva. Sea que el feedback llegue de una agencia asociada, o de un cliente, un vendedor o los consumidores, arrójelo al tacho de basura. Y si usted está forzado a medir lo social, hágalo con una plataforma que produce gráficos de torta sobre sentimientos con un enorme margen de error. Ningún marketer se propone arruinar una campaña, sea social o de otra índole. Pero las campañas sociales continúan en terapia intensiva. ¿Por qué? Porque los grandes contenidos son difíciles de crear, es dificultoso obtener insights, y la gente con poder para cambiar las cosas raramente sabe cómo hacerlo.

La oportunidad reside en hacer las cosas de una manera diferente. Invertir en grandes contenidos basados en insights reales y permanecer flexibles. Las cosas surgirán, los temperamentos se encenderán, y usted finalmente tendrá una posibilidad de hacer que su marca produzca algo asombroso.

Así que marketers, por favor, dejen de interponerse en el camino de su propio éxito.