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sábado, 9 de febrero de 2013

Tendencias

Nadie hace fila en las ciudades 2.0

En algunos municipios de la Argentina ya se pueden realizar trámites online, sacar turnos, efectuar reclamos, obtener información y pagar impuestos desde la comodidad del hogar usando una PC o con un teléfono inteligente
Por Cintia Perazo  | Para LA NACION
Un turista pasea por el museo y junto a la obra de arte observa un código QR. Toma su celular y en unos segundos obtiene en la pantalla información detallada sobre la pintura que está observando. La escena no transcurre en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, sino mucho más cerca, en el Museo de Arte del Tigre.
Los gobiernos -nacionales, municipales y provinciales- se han dado cuenta de que la tecnología puede acercarlos a los ciudadanos, hacer más eficiente su gestión y abaratar costos, así como incrementar la productividad y la capacidad de respuesta de sus empleados. Aunque en nuestro país el camino por recorrer aún es largo, varias provincias y municipios comenzaron a valerse de las nuevas tecnologías para facilitar a los ciudadanos el hacer trámites, tomar turnos y pagar sus impuestos.
"Una ciudad que no invierte en tecnología es una ciudad condenada al fracaso y al pasado. Hoy tenemos dos espacios públicos, el que recorremos día a día como las plazas, paseos y puerto, y uno nuevo, el de las redes sociales. A Tigre lo visita la misma cantidad de gente físicamente que en sus tres páginas de Internet. Apostamos a la tecnología, a la eficiencia y a los servicios como forma de acercarle a la palma de la mano al ciudadano su ciudad", dice Sergio Massa, intendente del municipio.

Obelisco online

Los habitantes de la ciudad de Buenos Aires pueden recorrerla por la Web y realizar varias gestiones desde el sitio del gobierno. "En la actualidad solamente el 5% de estos requerimientos o reclamos se hace de manera presencial. Estamos hablando de casi 200.000 requerimientos por año, o sea que sólo 10.000 se hacen de forma presencial, el resto se realiza por un canal electrónico", comenta Marcelo Olivet, subsecretario de Atención Ciudadana del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Olivet revela, además, que están por lanzar nuevas prestaciones en línea; por ejemplo, la partida de nacimiento se podrá solicitar, a partir del 15 de febrero, desde Internet. "El interesado deberá pagar en forma previa y recibirá la partida en su domicilio, por correo. Se podrá pagar con tarjeta de crédito o imprimir un comprobante y acudir a un Pago Fácil. En la actualidad los ciudadanos pueden pedirlo por Internet, pero tienen que retirarlo en la comuna elegida", explica el funcionario.
Por otro lado, en el gobierno de la ciudad de Buenos Aires está trabajando para implementar Faltas de Tránsito Online o asesoramiento online de faltas de tránsito. Hoy, si una persona quiere vender un auto que está radicado en la CABA y tiene una multa, debe dirigirse a un controlador de la ciudad, aunque viva en la provincia de Salta; es decir, debe viajar a Buenos Aires o contratar un gestor. A partir del nuevo servicio el vendedor podrá ver a analistas de faltas por Internet para pagar aquellas multas de tránsito que no sean graves. "Este sistema se va a empezar a implementarse a partir de marzo", dice Olivet.

La bonaerense digital

"En la provincia todo lo que sea digitalización nos beneficia por nuestras dimensiones. Somos más de 16 millones de habitantes en 135 municipios, con la complejidad que esto implica", observa Roberto Reale, subsecretario para la Modernización del Estado de la Provincia de Buenos Aires. En materia de seguridad, la tecnología le proporciona a la provincia una herramienta poderosa para prevenir el delito. "En el Ministerio de Justicia y Seguridad sumamos, al servicio del 911, el 911 Visual, donde los ciudadanos pueden enviar imágenes por correo electrónico o por mensajes multimedia (MMS) desde sus teléfonos celulares para denunciar presuntos hechos delictivos y luego, esta información es procesada en el Centro de Operaciones Policiales (COP)", explica Reale.
Por su parte, la Agencia de Recaudación (ARBA) permite realizar una gran cantidad de trámites online. "Desde www.arba.gov.ar los ciudadanos pueden conocer sus deudas, imprimir sus boletas, sumarse a planes de pago y hasta declarar las mejoras edilicias realizadas en sus inmuebles. También pueden acceder a información tributaria y efectuar preguntas y trámites vinculados con Ingresos Brutos, Inmobiliario y Automotores", resume el funcionario de la provincia de Buenos Aires.
Asimismo, en la Guía Única de Trámites informativa (www.gut.gba.gob.ar) el vecino puede encontrar la información sobre alrededor de 800 trámites provinciales. "Invitamos a los municipios para que se incorporen a esta plataforma sistematizando la información que ya tienen en sus sitios y simplificando los requisitos para los ciudadanos", dice Reale.

Tigre inteligente

Uno de los municipios donde la tecnología cobró protagonismo es Tigre, donde se tendieron más de 100 kilómetros de fibra óptica que enlaza sus edificios municipales, cuenta con una red de 800 cámaras de seguridad, turnos telefónicos para los centros de salud y hospitales, alarma en las escuelas conectadas al Centro Operaciones Tigre (COT) y la instalación de GPS en móviles de seguridad para el control de recorrido. "Hablar hoy de gobierno digital nos parece un término viejo, anacrónico, preferimos hablar de ciudad inteligente o ciudad 2.0", sostiene Lucas Lanza, director ejecutivo de la Agencia de Innovación Tecnológica de Tigre.
Mientras se recorre Tigre pueden observarse varios carteles con el logo de Wi-Fi, porque en este municipio hay Internet inalámbrica libre y gratuita en edificios escolares, plazas y espacios públicos. Además han implementado Tigre QR, un servicio que se vale de estos códigos para que ciudadanos y turistas accedan a contenidos online. Los QR en las paradas de colectivo informan de las líneas y los recorridos, y en el centro de la ciudad permiten obtener información en inglés, portugués y español de cada uno de los lugares emblemáticos, museos, restaurantes, casinos, parques, espacios públicos y el puerto.
Alerta Tigre 2.0 es una prestación que permite que cualquier vecino, previamente inscripto, pueda enviar una alerta inmediata ante delitos o emergencias al Centro de Operaciones Tigre (COT) desde su celular, Internet, redes sociales y lectores de tarjetas de crédito de locales comerciales. También se ofrece un botón antipánico en colectivos, escuelas y para mujeres golpeadas. "Para usar nuestros servicios el ciudadano primero se tiene que suscribir, en forma gratuita, y brindar sus datos. Queremos que sea una relación de mutuo compromiso y por eso necesitamos que nos suministren esta información", dice Lanza.
El servicio Sirve 2.0, por su parte, ofrece información para el vecino y éste puede denunciar o hacer reclamos sobre cuestiones que no son emergencia. Para poder comunicarse pueden utilizar smartphones, redes sociales o teléfonos de línea.
Por último cuentan con el Sistema de Información de Tránsito Online (Sitio) por el que los inspectores de tránsito y el personal del COT reciben tablets para que puedan tener acceso online a las licencias de conducir, habilitaciones de transportes, inhabilitaciones de conductores e infracciones. Próximamente podrán acceder también a la base de datos de habilitaciones de comercios. "Un Estado moderno es un estado ágil y eficaz, y esto sólo es posible utilizando las nuevas tecnologías de la información y la comunicación", resume Reale.

Los smartphones, protagonistas

  • Hace tan sólo 5 años casi nadie sabía qué era un código QR. Pero la revolución de los teléfonos inteligentes los convirtió en un lenguaje universal. Casi cualquier smartphone es capaz de decodificar la información contenida en un QR en cuestión de segundos. La Argentina es el país con más penetración de esta clase de móviles en la región.
  • El otro factor clave en la difusión de procedimientos online para realizar trámites, obtener información y participar es que los teléfonos inteligentes pueden acceder a la Web con casi las mismas prestaciones y funciones que una computadora personal.

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