Los portales tradicionales de empleo explotan la Web 2.0
24/02/11 - 16:15Brindan mayor interacción con sus usuarios y permiten el intercambio de ofertas e ideas para optimizar la búsqueda laboral con éxito.
REDES SOCIALES. Indispensables para facilitar la búsqueda laboral. (EFE)
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La versión 2.0 de la Web es más que una tecnología, es un estilo de vida. Permite una interacción continua entre usuarios y ahora es una herramienta indispensable cuando de encontrar el empleo ideal se trata. En el país, los portales más populares de la red no escapan a sus ventajas.
Las ofertas laborales dependen de las capacidades expansivas de negocios e industrias que al crearse o crecer permiten la generación de nuevos empleos. Lo importante es entender el proceso entre las necesidades de las empresas cuando seleccionan los perfiles más óptimos para ocupar sus puestos de trabajo y la de los trabajadores, que según su preparación académica y experiencia, buscan ubicarse de la mejor manera en el mercado laboral.
Así, en la brecha entre la oferta y la demanda profesional, se ubican los portales de empleos que sirven de intermediarios buscando satisfacer las necesidades de ambos lados. Atrás quedaron las viejas épocas donde habían usuarios pasivos, que tan sólo publicaban sus curriculums, y por el otro lado, empresas distantes con las cuales, muy poco se podía comunicar.
Ahora la constante comunicación en Internet, hace que los usuarios y las empresas se conecten más a través de los portales de empleo, sin que necesariamente se conviertan en redes sociales como tal. “Nuestra fan page en Facebook comunica todas las noticias y novedades que hay en el sitio”, explica Inés Álvarez, analista de producto de Empleos Clarín. Este portal cuenta con más de 13.000 usuarios en Facebook, los cuales se enteran día a día de las novedades que ofrece Clarín en materia laboral. “Tenemos un publico joven que ya tiene el hábito de entrar a Facebook, lo tiene de paso, el vincular las redes sociales lo hace más interactivo”, resalta.
Bumeran, agregó a su sitio un tipo de red social llamado Emplogger. “El proceso de búsqueda es un proceso muy solitario. Pero, el usuario, está acostumbrado a opinar o a interactuar. Esos niveles de interacción no se estaban dando. Decidimos tomar lo mejor de las redes sociales e incluirlas en la plataforma”, expresa Inés Rodríguez Navas, Gerente General de Bumeran Argentina. De esta forma, se pueden realizar consultas anónimas a las empresas y se intercambian experiencias tanto negativas como positivas entre los usuarios que los ayuda a elegir las mejores ofertas.
Los que buscan empleo se pueden llegar a sentir más incluidos, pero no siempre se llega a satisfacer sus necesidades laborales. Edgar Arias (22) dice que su experiencia es “positiva pero limitada, no hay mucha variedad en puestos de trabajo. Dado mi perfil y edad, hay más avisos para trabajar en call centers que en áreas de gastronomia y turismo”.
Una estudiante de maestría en búsqueda de trabajo, señala que: “para trabajar es fundamental hacer contactos, y las redes sociales son un recurso muy útil en ese sentido”.
El uso de los “beneficios 2.0” es indiscutible en el momento de buscar un trabajo. La “alianza” con las redes sociales permite que entre usuarios se informen de nuevas propuestas laborales y compartan experiencias que acompañen el proceso de búsqueda. Los portales se integran a las redes sociales, cada uno a su manera, y los usan cada vez más como una forma de acercar al postulante con la empresa y viceversa.
Las ofertas laborales dependen de las capacidades expansivas de negocios e industrias que al crearse o crecer permiten la generación de nuevos empleos. Lo importante es entender el proceso entre las necesidades de las empresas cuando seleccionan los perfiles más óptimos para ocupar sus puestos de trabajo y la de los trabajadores, que según su preparación académica y experiencia, buscan ubicarse de la mejor manera en el mercado laboral.
Así, en la brecha entre la oferta y la demanda profesional, se ubican los portales de empleos que sirven de intermediarios buscando satisfacer las necesidades de ambos lados. Atrás quedaron las viejas épocas donde habían usuarios pasivos, que tan sólo publicaban sus curriculums, y por el otro lado, empresas distantes con las cuales, muy poco se podía comunicar.
Ahora la constante comunicación en Internet, hace que los usuarios y las empresas se conecten más a través de los portales de empleo, sin que necesariamente se conviertan en redes sociales como tal. “Nuestra fan page en Facebook comunica todas las noticias y novedades que hay en el sitio”, explica Inés Álvarez, analista de producto de Empleos Clarín. Este portal cuenta con más de 13.000 usuarios en Facebook, los cuales se enteran día a día de las novedades que ofrece Clarín en materia laboral. “Tenemos un publico joven que ya tiene el hábito de entrar a Facebook, lo tiene de paso, el vincular las redes sociales lo hace más interactivo”, resalta.
Bumeran, agregó a su sitio un tipo de red social llamado Emplogger. “El proceso de búsqueda es un proceso muy solitario. Pero, el usuario, está acostumbrado a opinar o a interactuar. Esos niveles de interacción no se estaban dando. Decidimos tomar lo mejor de las redes sociales e incluirlas en la plataforma”, expresa Inés Rodríguez Navas, Gerente General de Bumeran Argentina. De esta forma, se pueden realizar consultas anónimas a las empresas y se intercambian experiencias tanto negativas como positivas entre los usuarios que los ayuda a elegir las mejores ofertas.
Los que buscan empleo se pueden llegar a sentir más incluidos, pero no siempre se llega a satisfacer sus necesidades laborales. Edgar Arias (22) dice que su experiencia es “positiva pero limitada, no hay mucha variedad en puestos de trabajo. Dado mi perfil y edad, hay más avisos para trabajar en call centers que en áreas de gastronomia y turismo”.
Una estudiante de maestría en búsqueda de trabajo, señala que: “para trabajar es fundamental hacer contactos, y las redes sociales son un recurso muy útil en ese sentido”.
El uso de los “beneficios 2.0” es indiscutible en el momento de buscar un trabajo. La “alianza” con las redes sociales permite que entre usuarios se informen de nuevas propuestas laborales y compartan experiencias que acompañen el proceso de búsqueda. Los portales se integran a las redes sociales, cada uno a su manera, y los usan cada vez más como una forma de acercar al postulante con la empresa y viceversa.
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