Una falsa y otra verdadera: dos ideas para hacer publicidad comparativa

Parecería que en las últimas semanas estuviera obsesionado con la publicidad comparativa. Los posteos sobre la más reciente campaña de Audi emitida durante la tanda del Super Bowl y sobre el comercial de Telecentro (y sus “predecesores” de Pepsi) así lo estarían indicando.
Sin embargo, esta vez el tema se dispara a partir de una idea que los estudiantes alemanes Zoe Vogelius y Thomas Illum hicieron circular en la web, con FedEx como supuesto cliente.
Se trata de una pieza que se inscribe dentro de una categoría llamada habitualmente ambient, que los festivales suelen prever para activaciones no tradicionales de marca en la vía pública o puntos de venta.
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Con una obvia pero al mismo tiempo ciertamente sutil referencia a su archirrival DHL Express, la sola idea de lanzar una abultada flota de camiones de FedEx a las calles del mundo con la competencia tan burlonamente relegada es una creación de abrumadora potencia y arriesgada ejecución que impacta de lleno en el atributo clave del negocio del transporte de mercaderías: el tiempo.
La genealogía de esta idea habría que buscarla en otra pieza, en este caso de gráfica, realizada por BBDO Alemania en 2007, también para FedEx y que involucraba al otro competidor de esa industria: UPS.
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