Cómo será el documental sobre Néstor Kirchner
Adrián Caetano, el director del largometraje que se estrenaría antes de las elecciones, contó detalles de su realización a lanacion.com; cuál es el rol de la hija del ex presidente; en 2007, el cineasta colaboró en la campaña de Cristina a través de la productora de Marcelo Tinelli
Jueves 03 de marzo de 2011 | 14:43 (actualizado a las 15:32)
Adrián Caetano. Foto Archivo
Antes de las elecciones de octubre próximo, si todo sale como lo planeado, se podrá ver en la pantalla grande la vida de Néstor Kirchner. La idea comenzó a sonar desde la repentina muerte el ex presidente, el 27 de octubre pasado, y en los últimos días comenzó a madurar con las primeras reuniones de los ideólogos (el diputado kirchnerista bonaerense Fernando Navarro y el publicista Jorge "Topo" Devoto) con Adrián Caetano, el cineasta uruguayo que estará al frente del largometraje.
En diálogo con lanacion.com, el director de Francia, Crónica de una fuga y Pizza, birra, faso, explica que la idea del documental es contar la carrera política del santacruceño a través únicamente de imágenes, desde "un lugar objetivo, para que no se convierta en una parodia obsecuente". El realizador, de 42 años, asegura ser un "escéptico de la política", aunque confiesa tener "más simpatías que antipatías por este gobierno" pero que no se va a "trasformar en oficialista por hacer una película". Además, reveló haber trabajado en la campaña presidencial de Cristina Kirchner en 2007, pero no desde la ideología, sino como "un trabajo más" que le pidió Ideas del Sur, la productora de Marcelo Tinelli.
En su equipo, Caetano cuenta con una participación especial e invalorable, según cuenta: Florencia Kirchner, cuya "voluntad de servicio y humildad es sorprendente". La hija menor del matrimonio Kirchner comenzó a estudiar dirección de cine el año pasado en la New York Film Academy, pero regresó al país cuando falleció su padre.
-¿Cómo te llegó la propuesta de dirigir el documental de Néstor Kirchner?
-Me llamó Jorge Devoto hará diez días para hacerme la propuesta. La que me hizo el nexo fue Liliana Mazure (titular del Incaa). Me llamó y me dijo que querían hacer un documental de Néstor Kirchner. Ellos venían con el proyecto medio armado, se habían reunido con otro director, con un proyecto de documental que no era el mismo que yo me imaginaba.
-¿Cuáles son tus ideas para el documental?
-Quiero trabajar en imágenes de archivo y que no se convierta en un panfleto oficialista. El desafío es cómo armar una película sólo con imágenes de archivo, audio, fotos, sin nadie hablando ni voz en off. Nada más que los hechos mismos. Eso es lo que lo convierte en un documental bastante objetivo, que es lo que quiero hacer. Armar un discurso comprensible para entender al hombre político más allá de las ideologías. Quiero hacer una película para que pueda ver todo el mundo y que cada uno saque sus conclusiones. Está pensada no sólo para la generación a la que él pertenecía, no sólo para el peronismo militante, sino para toda la sociedad.
-¿Cuál fue tu reacción cuando recibiste la propuesta?
-Me sorprendió gratamente. Saben, de movida, que no soy una persona obsecuente. Me llaman por ser un director de cine. En ningún momento me convocaron por ninguna tendencia oficialista. Siempre fui un tipo muy independiente. Si bien tengo más simpatías que antipatías por este gobierno, nunca salí en ningún programa a hablar bajo la bandera del oficialismo.
-¿Qué significa para vos este trabajo?
-Quiero construir una película más de mi carrera, que es algo coyuntural de mi carrera. No es un detalle menor que sea de Kirchner, es un desafío muy grande. Para mí es una oportunidad histórica.
-En una sociedad polarizada, ¿temés quedar rotulado como un director oficialista?
-No, porque yo no polarizo. Polarizan los que no tienen idea. Me parece una estupidez, no me voy a transformar en oficialista por hacer una película. Lo que sí ocurre es que estoy metiéndome en la piel del loco, obsesionándome por él como artista.
-¿Cuál es la riqueza del personaje de Kirchner?
-Yo propongo algo no convencional. No quería caer en lo sensiblero o algo biográfico.
-Me interesa hacer un documental político sobre ese personaje político que vino de no se sabe dónde y que llegó cuando la Argentina era un quilombo. Terminó ganando el ballotage porque se retiró el Turco [Carlos Menem]. Todos pensaban que era un títere de Duhalde, decían que no iba a durar, y hoy es un tipo fundamental dentro de la historia política argentina. Así como en su momento Alfonsín tuvo una presencia histórica, Kirchner es el primer presidente democrático en agarrar un país que estaba por desaparecer como país. Atrás del loco este había un plan, una ideología, más allá de la ambición de poder. Si uno se pone a pensar en los logros objetivamente que hay en este gobierno, uno puede cuestionar los modos de implementar las medidas, pero las medidas son positivas.
Néstor Kirchner, un personaje interesanteFoto: Archivo
-¿Ya habías pensado en hacer una película sobre él?
-No. Nunca fui oficialista, pero empecé a interesarme en Kirchner a partir de su fallecimiento. Uno empieza con esas cosas un poco necrofílicas, de valorar a alguien cuando se muere. Yo no pude escapar a eso y me dio pena perder a un tipo así, a un tipo que se dedica a la política, ya sea de la oposición o del oficialismo. Siempre me interesó la política. Vengo de una familia de comunistas en Uruguay, de una familia netamente de izquierda. De hecho, me considero un tipo de izquierda.
-¿Cómo está compuesto el equipo de trabajo?
-Ayer me reuní con [el periodista Carlos] Polimeni y [el filósofo de Carta Abierta, Ricardo] Foster, que están con la investigación. Navarro y Devoto serían los productores. Además, aceptaron de buena gana a gente que trabaja conmigo.
-¿Los productores bajaron alguna línea?
-Como en todo trabajo que hice, excepto en las películas independientes, siempre tengo que conciliar. Conciliar no es transar. Me dijeron 'Nosotros no queremos hacer nada partidario'. Vamos a reflejar el debe y haber, derrotas y triunfos, pero no desde un lugar demagógico. Lo que hay que contar es la parte humana, las flaquezas, los triunfos, las miserias.
-Florencia Kirchner está colaborando con el documental. ¿Cuál es su rol?
No tiene un rol definido. Es como una referente constante. Me está ayudando muchísimo con material no oficial que yo busco. Su figura me abre muchas puertas para evitarme los trámites burocráticos.
-Ella estudió cine, ¿aporta también a la parte creativa?
-Por lo pronto, mi manera de trabajar es muy abierta y democrática. La creación colectiva siempre funciona mejor que la de una sola persona. Necesito la opinión de ella, más sabiendo que estudió cine. Lo que más me interesa es que tiene una voluntad de servicio y una humildad sorprendente.
-¿Te encontraste con la Presidenta o tenés pensado hacerlo?
-Aún no me encontré. Sería fundamental. La semana que viene tengo programado un viaje al Sur y supongo que ahí me cruzaré con ella. De todas maneras, el documental es una producción que me encargan Navarro y Devoto, no un pedido gubernamental. Nace más de una actitud militante.
-¿Cómo avanza el trabajo de investigación?
-Estoy tratando de encontrar hitos en la carrera política de él sobre los cuales poder basar el relato. Además, hay una forma que la producción eligió de recaudar material, que es la de convocar a gente a enviar su material, que no tenga que ver con las cosas gubernamentales, sino más caseras.
-¿Van a tratar la vida privada de Néstor?
-No, no me interesa. Tal vez me sirve como punto de partida pero nada más.
-Pero al ser un matrimonio de políticos, la vida privada y política están muy relacionadas...
-Sí. Bueno, otro de los hitos importantes en su vida política es la asunción de la Presidenta.
-¿Hay estipulada alguna fecha de estreno?
-Se maneja agosto, septiembre.
-¿Creés que el documental va a influir en las elecciones de octubre?
-¿Este año hay elecciones? Mirá, ni sabía. Ni voto, nunca voté. En Uruguay tampoco voto. Aunque de joven he militado en Uruguay, y acá para la JP.
-¿Y qué pasó?
-Cuando le hice la campaña al Turco, me sentí súper traicionado y me puse súper escéptico. Soy un desconfiado absoluto. Desconfiado del poder, más que de la política. El poder puede ser algo muy peligroso si no se sabe como pilotearla.
-¿Y el escepticismo se está diluyendo con este documental?
-No. Eso me permite ponerme en un lugar objetivo para que no se convierta en una parodia obsecuente o en un anecdotario de hechos.
-Ahora que estás más interiorizado con la vida política de Kirchner. ¿Cuál considerás que fueron su mayor triunfo y su mayor fracaso?
-El triunfo es todo. Es haber reconstruido algo que trascendió su muerte. No es sencillo lo que se hizo en esta gestión, hay cosas que se han hecho que no son moco de pavo. Igual que en Uruguay o Brasil, los gobiernos más progresistas que han intentado mover las fichas del tablero tuvieron logros sociales que después no los podés tirar para atrás. El mayor logro del tipo fue conformar un país que funcione como país. Gobernar. Antes no se gobernaba, había un tipo que andaba en Ferrari.
-¿Y el fracaso?
-No sé. Cuando uno hace política, si uno es un buen político, la gran astucia es trasformar derrotas en éxitos. Lo del campo, por ejemplo. Se puede tomar como una derrota, pero yo ahí me di cuenta quién era la gente del campo. Había gente del campo que tenía mucha plata que prefería tirar la comida al costado de la ruta en lugar de dar el brazo a torcer. Puede ser una derrota política pero a mí me abrió la cabeza.
Ideas del Sur, en campaña
-Dijiste que le hiciste la campaña a Menem...
-No, no le hice la campaña a Menem. Participé desde la militancia, yo era chico, tenía 17, 18 años.
-¿Le harías campaña al kirchnerismo?
-Los spots de Cristina de 2007 los hice yo. En esa época me había contactado la productora de Tinelli. Me llamaron para decirme que había que hacer unos spots publicitarios para la campaña de Cristina y lo hice como un trabajo más. No vino directamente de un lado político. Vino por la productora de Tinelli, con los que yo tenía contactos por Disputas y Tumberos.
-¿Trabajarías para la campaña del oficialismo para este año?
-Este año no podría porque estoy con el documental, pero sí, lo haría.
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